La salud un derecho universal, por Ángela Escribano Martínez

Dentro de unos días las personas que no tengan regularizada su situación en España  dejaran de tener derecho a la salud, una salud que definía el Congreso de Constitución de la OMS, celebrado el 7 de abril de 1948:
Ø      La aspiración de todos los pueblos es el goce máximo de salud para todos los ciudadanos.
Ø      La salud es el estado de absoluto bienestar físico, mental y social, sin distinción de religiones, credos políticos o clases sociales.
Ø      Todo hombre y (mujer)[1]tiene derecho a conservar su salud y, en caso de que enferme, a poseer los medios para curarse. Esta protección debe abarcar no sólo a él, sino también a sus familiares.
Y también la Referencia a la salud en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, redactada por la Asamblea General de la O.N.U. el 10 de diciembre de 1948:
Art.25.
1.- Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar y, en especial, la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene, asimismo, derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez y otros casos, como pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad.
2.- La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. Todos los niños, nacidos de matrimonio o fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social.
Pero… aquí en España el gobierno del PP, considera este derecho como un gasto que ha llevado al país a la ruina y, en lugar de dirigir sus acciones hacia la evasión fiscal, las grandes empresas que cotizan en el IBEX 35, aeliminar la subvención a la iglesia misógina -a la que no se oye, a pesar de dejar a los y las personas más  necesitadas fuera del sistema- a los grandes eventos, al deporte de elite, a los privilegios de la clase política y.. a aquellos-hombres mayoritariamente- responsables de los bancos que falsificaron y mintieron para obtener un dinero que no podrían devolver y que ahora tenemos que pagar -mientras- se han enriquecido.
Las personas a las que más les afecta –la mayoría mujeres irregulares- que dejaron en su país a sus familias para cuidar a las nuestras y, que ahora dejaremos enfermas por un puñado de euros. Que además… colapsaran las urgencias de un sistema sanitario del que tanto nos hemos enorgullecido, y que ahora está colapsado y abandonado, con profesionales enfrentándose a pacientes que no pueden atender porque cada vez la plantilla es menor y las necesidades mayores, profesionales que se desesperan al ver como desaparece y se deja abandonado un sistema sanitario que algún día fue universal y solidario.

Ángela Escribano Martínez


[1] Lo ha añadido Ángela Escribano Martinez

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