Desde los años 80 el feminismo académico ha reclamado la incorporación de los estudios de género en la Universidad. En 2005 numerosas personas provenientes de diferentes universidades así como de otros ámbitos sociales y profesionales nos reunimos en Oñati para debatir acerca de la necesidad de los estudios feministas, de mujeres y de género a la enseñanza universitaria. En 2015 hemos considerado necesario volver a reunirnos en el mismo lugar y con la misma preocupación, y al igual que hicimos en aquella ocasión, en esta también hemos acordado hacer públicas las siguientes consideraciones y propuestas para que sean apoyadas por la comunidad universitaria y el resto de la sociedad.
A día de hoy, y una vez finalizado el proceso de construcción del Espacio Europeo de Enseñanza Superior impulsado a partir de la Declaración de Bolonia, ya contamos con nuevos planes de estudio en todas las titulaciones universitarias que, salvo alguna excepción, incumplen sistemáticamente las obligaciones de docencia, investigación y formación en género establecidas por el Legislativo a través de Leyes Orgánicas de obligado cumplimiento. En este sentido, se pronuncia la L.O. 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género que en su art. 4.7 establece: “Las universidades incluirán y fomentarán en todos los ámbitos académicos la formación, docencia e investigación en igualdad de género”. Y en este mismo sentido, se pronuncia también la L.O. 3/2007, de 22 de marzo para la Igualdad efectiva de Mujeres y Hombres, así como diferentes leyes autonómicas en el marco de sus respectivas competencias.
En 2005 solicitábamos a las instituciones públicas con competencia en materia de enseñanza superior y en particular a las universidades que incorporaran modelos concretos de estudios feministas, de mujeres y de género a la enseñanza universitaria y que hicieran explícito su compromiso en favor de la igualdad y la no discriminación entre los sexos dentro y fuera de la propia universidad.
Lo hacíamos mediante propuestas como estas:
1. Creación de un Grado como titulación específica de Estudios de Género orientado fundamentalmente a la formación de la figura profesional de Agente de Igualdad.
2. Creación de Posgrados específicos orientados a la especialización en materia de estudios de género en distintas áreas de conocimiento.
3. Oferta de asignaturas específicas (troncales y optativas) adaptadas a cada una de las titulaciones universitarias dirigidas a introducir la perspectiva de los estudios feministas, de mujeres y de género en las distintas disciplinas.
4. Adaptación de los programas de diversas asignaturas introduciendo contenidos específicos con perspectiva feminista y de género en aquellos en los que se considere pertinente.
Transcurridos más de 10 años de la aprobación de una legislación que estipula la necesidad de incluir la formación de temas de género en la formación universitaria (leyes de igualdad y de violencia de género, entre otras) y observando su sistemático incumplimiento:
SEÑALAMOS y DENUNCIAMOS QUE:
1. Muchas universidades no han incluido ninguna asignatura relativa a los temas feministas y de género en los grados universitarios. La especificidad de dichas formaciones requieren de una doble estrategia: la transversalización de los estudios de género en el contenido de todos los grados y la inclusión de materias específicas en los mismos.
La insuficiencia de los resultados obtenidos hasta el momento se muestra claramente en el hecho de que el Estado español no ha av