Haíti: mueren en el terremoto las feministas Myriam Merlet y Magalie Marcelin

Myriam Merlet fue una de las líderes de  30 mil mujeres que el 13 de abril del 1986, apenas dos meses después de derrocada la dictadura, tomaron las calles de Puerto Principe para demandar fin a la pobreza, el hostigamiento sexual, las violaciones, acceso a préstamos para las mujeres, trabajo y educación para ellas. De profesión economista, fue asesora especial del Ministerio de la Condición Femenina y los Derechos de las Mujeres de Haití, autora de varios artículos sobre los derechos de la mujeres y los derechos humanos.
Entre ellos destaca: “Haití: mujeres en busca de la ciudadanía de pleno derecho en una transición sin fin”, publicado en el compilado: De lo privado a lo público: 30 años de lucha ciudadana de las mujeres en América Latina, México, Siglo XXI,  editado en 2006 por el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (Unifem por sus siglas en inglés).
Magalie Marcelin, de la organización Casa de las Mujeres, trabajaba para educar a mujeres jóvenes sobre sus derechos;, destacó su participación de 2007 en  Haití cuando las organizaciones feministas denunciaron ante la  organización de las Naciones Unidas (ONU), a más de 100 cascos azules de la ONU procedentes de Siri Lanka, que fueron deportados por asociación ilícita al haber pagado $1 dólar a niñas de hasta 13 años por tener sexo con ellos.
Fue una de las fundadoras de la Casa de las Mujeres; en 1996 organizó el primer tribunal alternativo de mujeres contra la violencia en su país, rompiendo silencios y abriendo el debate sobre la violencia en Haití, también era activista de la Marcha Mundial de Mujeres.

Un comentario en “Haíti: mueren en el terremoto las feministas Myriam Merlet y Magalie Marcelin”

  1. Isabel Romana

    Mi mas sentido pésame. Luchadoras como ellas son tan necesarias como el aire que respiramos. El movimiento de las mujeres en pro de sus derechos no debe cesar jamás, y creo que su hueco será ocupado por otras haitianas tan comprometidas como ellas. Un abrazo, querida amiga.

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